
Cuando una nueva banda está en boca de todos y no le faltan los elogios, me acerco a ella con mucho escepticismo y cuando ha pasado un tiempo. Luego, si el disco es la mitad de honesto que el debut homónimo de León Benavente(Marxophone, 2013), no me corto un pelo en sumarme al clamor general y reivindicarlo como uno de los mejores discos nacionales del año. Es más: me atrevo a decir que si León Benavente hubiera editado su disco ...